Hola corazones, como sabéis todos los materiales y libros de la filosofía Montessori me gustan bastante. Mi primer libro de la casa Montessori, es un libro con muchas actividades de autonomía, y un montón de fantásticas pegatinas. Como siempre la Editorial VVKids, nos trae libros y materiales increíbles, que nos ayudan a pasar muy buenos momentos con los peques.
Mi primer libro de la casa Montessori
Estos días que estamos mucho más tiempo en casa con los peques, le estamos dando mucho uso a este fantástico libro.
Siempre me planteo qué tipo de actividades pueden llevar los peques dentro de casa, me gusta que sean interactivas y dinámicas, pero que con ello también lleven un aprendizaje que facilite su autonomía.
¿Podemos ordenar y organizar espacios en nuestras casas según la filosofía Montessori?
La respuesta es sí, influye muchísimo como presentamos los materiales y los espacios en casa. Con Mi primer libro de la casa Montessori podemos dar respuesta a estas dudas que a veces nos planteamos, y te aseguro que nos da tantas ideas divertidas en las que los peques pueden participar que no se quejarán por aprender a poner la mesa, ordenar su habitación, etiquetar su ropa, barrer el suelo o crear su propia estantería.
De esta misma colección tenemos varios libros de la Editorial y una caja de emociones Montessori que es fantástica. Te dejo el enlace del post por si quieres verla con detalle.
ACTIVIDADES EN CASA
Sin duda, si algo bueno hemos sacado de este confinamiento, es el tiempo que compartimos juntos en casa. La rutina del día a día no hace fácil el poder llevar a cabo muchas de las cosas que hemos hecho en familia durante estos días. Cierto que los peques van aprendiendo a vestirse solos, y dentro de lo que cabe, intentar ayudar a poner la mesa o la colada. Pero con las prisas muchas veces terminamos como padres haciéndolo nosotros para terminar antes, y poder llegar a tiempo al cole, al trabajo o a las actividades del día a día.
MANUALIDAD DIY CEPILLADO DE DIENTES INSPIRADA EN MI PRIMER LIBRO DE LA CASA MONTESSORI
El cepillado de dientes es algo que hemos tenido en cuenta desde el inicio de la dentición de los bichillos.
Lógicamente siempre con supervisión y ayuda para que la limpieza bucal sea correcta. En ocasiones, rechazan este acto, les molesta el cepillo de dientes, el sabor del gel dentífrico o no tienen el hábito adquirido.
De ahí, que se me ha ocurrido esta manualidad tan divertida y tan fácil.
Simplemente han coloreado unos dibujos de un niño y una niña con una amplia boca, luego la hemos plastificado y hemos pegado alubias blancas con cola fría. El cepillo también lo hemos hecho de manera casera, con un depresor o palo de polo del color preferido y un poco de esponja o estropajo. Así de fácil, tenemos una manaualidad educativa que desarrolla su autonomía. Además, normaliza el momento del cepillado de dientes haciéndolo mucho más divertido.
DÓNDE PODEMOS COMPRAR MI PRIMER LIBRO DE LA CASA MONTESSORI
Puedes comprarlo en tu librería habitual, te dejo aquí un enlace para que veas la disponibilidad, y en Amazon
2 Comentarios
Que bien que estas actividades de alguna manera les hagan más llevadero el confinamiento, mis hijos también ayudan en alguna actividades de la casa, ayudan a poner la mesa o colocar la ropa en la lavadora para luego encargarse también de ponerla en el tendedero, este libro me ha parecido entretenido, he escuchado un poco de la filosofía Montessori aunque no estoy muy familiarizada con ella me parece una opción interesante para la crianza de los pequeños.
Holaa
Pues yo como Higienista dental tengo que decir que me ha encantado la idea. Ojalá muchas madres prestaran tanto empeño en el cuidado de los dientes de sus niños y no sólo eso, si no en que cojan el hábito que es lo realmente complicado.
La técnica es muy buena y el DIY además súper divertido! Éstas son las cosas que se les quedan jejej
En cuanto a ayudarlos a coger el hábito aunque parezca una tontería el hecho de que el cepillo sea de algún personaje que les guste y el típico de colorines les motiva. Y lo de la pasta es un mundo, se las hacen tan tan dulces que muchos niños niños no se lavan los dientes por lo desagradable que les resulte. Las madres por no tirar un bote entero los fuerzan… pero si ya se ve imposible es mejor desistir y buscar una pasta con un sabor más suave que les resulte agradable.
Ains perdón por el rollo es que me ha encantado tu post!
Besazos